Tratando de entender a Dios

Raquel Bouvet de Korniejczuk

sábado 14 de diciembre, 2013

Muchas veces decimos a los niños que son demasiado pequeños para comprender algunas cosas, que deben esperar crecer y madurar para entenderlas. Por ejemplo, ¿a qué edad se puede comprender el teorema de Pitágoras? La realidad es que no se necesita más edad y más madurez para comprender un teorema matemático. Se necesitan estructuras conceptuales a las que puedan conectarse el teorema, madurez intelectual y entrenamiento en el razonamiento matemático.  Por eso, para un docente de matemáticas la explicación de este teorema puede resultar simple, mientras que para un niño pequeño o un adulto sin los conocimientos previos es casi incomprensible.

 

Cuando se trata de entender y conocer a Dios, no solamente se requieren conocimientos previos y madurez intelectual, sino también una comprensión espiritual, ya que el razonamiento humano es insuficiente para alcanzar las realidades espirituales. ¡Quién puede conocer y comprender a Dios cuando se trata de un Ser mucho más amplio y profundo que los seres humanos!

 

Con todo, es maravilloso que un niño pequeño puede, a pesar de su comprensión y vivencias limitados, conocer a Dios y amarlo, pero, al mismo tiempo, un adulto erudito y que mantiene una relación íntima con Dios, aún encuentra que Dios es un misterio insondable. Es que el conocimiento de Dios y una relación con Él se desarrollan como en círculos concéntricos, en un espiral sin fin.

 

Al tratar de conocer a Dios, uno de los aspectos más intrigantes para la mente humana es captar la idea de que Dios es uno, pero conformado por tres personas. No tenemos ningún ejemplo humano de unidad tal en el que tres personas tengan el mismo propósito, la misma autoridad y los mismos ámbitos de injerencia, yque verdaderamente funcionen como uno. Tal vez, para nuestra comprensión, la analogía más cercana a la divinidad sea el matrimonio, pero en la actualidad está tan desfigurada esta relación, que el ejemplo se ve como demasiado imperfecto.

 

¿Por dónde comenzarías a comprender a Dios como tres personas en tal unidad, que realmente es una sola?

 

Explora en la Biblia en busca de una comprensión más cabal de la trinidad, leyendo una explicación que Jesús dio a sus discípulos sobre el tema, registrada por Juan en los capítulos 14 al 16.

Sugiero que para un estudio profundo

a)    Elabores un cuadro con tres columnas: Dios Padre, Jesús ("yo" en el texto de Juan) y el Espíritu Santo o Consolador

b)   Leas el texto y marques los versículos que hacen referencia al Padre, a Jesús y al Espíritu Santo.

c)    Realices un retrato individual de esas tres personas como Dios a partir del texto.

d)   Analices la relación de las tres personas entre sí y con los seres humanos.

e)    Prestes especial atención a los textos en los que se mencionan los tres juntos (Ej.: Juan 14:16, 26; 15:26) para comprender la dinámica entre las tres personas de la divinidad.

 

Después de realizado este ejercicio, prepárate para compartir tu experiencia acerca de cbado.﷽﷽﷽﷽﷽ su grupo pequeño el sonvicciones con su grupo pequeño el sn las oraciones Jeslectual, sino tambievios es sumamente inómo este texto te ayudó a comprender mejor quién es Dios en sus tres personas, y qué aplicaciones prácticas tiene esta comprensión en tu vida diaria. Por ejemplo, puede haberte ayudado a saber que en las oraciones Jesús nos indica que debemos dirigirnos al Padre y no a Él (Jesús) al elevar nuestros agradecimientos y peticiones, pero hacerlos en su nombre (en el nombre de Jesús). Comparte tus descubrimientos y convicciones con tu grupo pequeño el sábado.