“Quien llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando muertos a los pecados, vivamos a la justicia, y por cuya herida fuisteis sanados”

1 Pedro 2:24

Conclusión

viernes 15 noviembre, 2013

PARA ESTUDIAR Y MEDITAR:

“La expiación, primera parte: El sacrificio expiatorio”

Comentario bíblico adventista, tomo 7-A, p. 456, 457

Lo que Martín Lutero con frecuencia llamó un “intercambio maravilloso”, o “un intercambio gozoso”, la justicia de Cristo por el pecado humano, Elena de White lo describe en una declaración clásica como sigue:

“Cristo fue tratado como nosotros merecemos a fin de que nosotros pudiésemos ser tratados como él merece. Fue condenado por nuestros pecados, en los que no había participado, a fin de que nosotros pudiésemos ser justificados por su justicia, en la cual no habíamos participado. Él sufrió la muerte nuestra, a fin de que pudiésemos recibir la vida suya. ‘Por su llaga fuimos nosotros curados’ ”

DTG 16, 17

“Y nada menos que la muerte de Cristo podía hacer eficaz para nosotros este amor. Es únicamente por causa de su muerte por lo que nosotros podemos considerar con gozo su segunda venida. Su sacrificio es el centro de nuestra esperanza. En él debemos fijar nuestra fe”

DTG 614, 615

PREGUNTAS PARA DIALOGAR:

  1. A algunos no les gusta la idea de Jesús como nuestro sacrificio. Piensan que Dios parece sediento de sangre o vengativo, como las divinidades paganas del pasado. (De hecho, algunos alegan que el lenguaje de sangre y sacrificios en la Biblia es sencillamente un reflejo de esos conceptos paganos.) ¿Qué es lo que está dramáticamente equivocado en esta percepción de la cruz? ¿De qué modo los conceptos de la muerte, el sacrificio y la sangre ayudan a mostrarnos cuán serio es el pecado y sus consecuencias? ¿De qué manera el darnos cuenta del costo del pecado nos ayuda a buscar el poder de Dios para poner el pecado fuera de nuestra vida?
  2. Algunas personas luchan con el problema de las obras y cómo se relacionan con la salvación. ¿De qué forma el mantener delante de nosotros la muerte sustitutiva de Cristo, y lo que ella logró por nosotros, puede ayudar a protegernos de caer en la trampa de la salvación por obras? Después de todo, ¿qué podrían añadir nuestras obras a lo que Cristo hizo por nosotros al morir en lugar de nosotros?
  3. Elena de White dijo que sería bueno pasar una hora reflexiva cada día concentrándonos en la vida de Jesús, en especial en las escenas finales. ¿Cómo puede este ejercicio ayudarnos a fortalecer nuestra relación con Cristo, así como aumentar nuestro aprecio de lo que él hizo por nosotros?

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