“Porque por tus palabras serás justificado, y por tus palabras serás condenado”

Mateo 12:37

LAS COSAS “PEQUEÑAS”

martes 11 noviembre, 2014

Lee Santiago 3:3 al 5. ¿Qué tienen en común estas dos ilustraciones, y cómo se relacionan con la lengua?

Tanto el freno de un caballo como el timón de una embarcación son muy pequeños comparados con lo que controlan. No obstante, con un leve movimiento de la mano, la dirección del caballo o del barco puede cambiar completamente. Del mismo modo, “la lengua es un miembro pequeño, pero se jacta de grandes cosas” (vers. 5). Al igual que una palabra, o aun una mirada o un gesto pueden parecer pequeños, pero cada uno puede cambiar a un amigo en un enemigo, o transformar una situación mala en algo bueno. “La blanda respuesta quita la ira; mas la palabra áspera hace subir el furor” (Prov. 15:1). Imagínate un caballo a todo galope o un barco a toda velocidad, pero ambos en la dirección equivocada. Cuanto más rápido va algo, tanto más lejos se aparta de su destino. El mejor curso, entonces, es detenerlo y darlo vuelta tan pronto como sea posible. Lo mismo es cierto de nuestras palabras. Si una conversación va de mal en peor, cuanto más pronto la detengamos, tanto mejor.

Lee Lucas 9:51 al 56. ¿Cuál fue la respuesta de Jesús a la sugerencia de los discípulos? ¿Cuál fue el resultado, y qué lecciones puede darnos esta historia?

Aunque los discípulos tenían un precedente bíblico para su sugerencia (2 Rey. 1:10, 12), Jesús rechazó la propuesta. Su reprensión alteró dramáticamente la situación. La historia termina indicando que “se fueron a otra aldea” (Luc. 9:56). Jesús transformó el rechazo que sufrió en una aldea samaritana en un aprendizaje para sus seguidores. En el calor del momento, cuando los sentimientos arden y piden que nos defendamos, podemos recordar el ejemplo de Jesús y, en forma figurada, irnos “a otra aldea”.

“Así como las gotas de agua forman un río, las cosas pequeñas forman la vida. La vida es un río sereno, calmo y placentero o es un río agitado, que arroja siempre cieno y barro”

TIMKH, p. 209

¿Qué cosas “pequeñas” hay en tu vida que pueden no ser tan “pequeñas” al final?

Más de ESU